Hoy sábado, por lo cual es un día de currar... y hoy a parte de hacer mi trabajo acabaría en la cocina para ayudarles, lo que agradezco porque el trabajo de cocina me es mucho mas entretenido de hacer y menos cansado (de house keeper voy todo el rato con cubos, aspiradoras y fregonas por todo el hostel).
Como era de esperar un sábado que uno se levanta pronto para trabajar, decido dormir una gran siesta y esperar a ver que me deparará esta noche. Como Arturo (nuestro italiano favorito) se va mañana, hoy toca hacerle la despedida correspondiente, por lo que nos enperifollamos (camiseta y vaqueros xD) y nos vamos a Old Street (un sitio buenísimo para ir de fiesta por Londres). Por Old Street nos pegaríamos una buena fiesta, y teniendo muy en cuenta que al primer lugar que entramos hacía un calor que era infernal, y os lo dice un tio que vive en Sevilla y sabe lo que es ir a trabajar a las 3 de la tarde en verano a 45 grados cruzando a pata el puente de los toldos (Plaza de Armas).
Con nuestros cuerpos sudorosos a mas no poder (no penseis mal.. o sí porque no, paso de vosotros ^^) Arturo pedía cervezas con chupito de ron incluído. Ahora un pequeño inciso, imaginaros a Manu, un bilbaino que iba en manga corta cuando los demás íbamos en cazadora, metido ahí dentro con ese calor sofocante, mirar la foto xD.
Pues ahí estábamos de fiesta en el infierno, pero eso sí pasándolo del carajo, con nuestros italianos, William y Bradley (ya os he hablando de ellos creo, pero por si acaso os digo que son unos cracks) disfrutando, bailando y bebiendo. Al rato nos largamos de allí y entramos en otro sitio, con una pequeña historia en medio en la cual Bradley y yo nos metimos a separar en medio de una pelea que se monto en frente nuestra.
Ya en el otro local nos pegaríamos otro buen rato, hasta cerrarlo también como el anterior y decidimos volvernos, obviamente pasando antes por un pollo frito de estos que están hasta las tantas que vimos en el camino jeje.
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